Pasar el puente de diciembre en Madrid tiene, en mi opinión, mucho encanto.
Nosotros siempre aprovechamos para ver las luces que iluminan la ciudad en Navidad, recorrer lugares especiales… y más este año
Nuestra hija ya es muy consciente de todo lo que le rodea y ha disfrutado estos tres días juntos, en familia, a lo grande.
Ha comido churros con chocolate -tan típicos de aquí, aunque yo prefiero los buñuelos valencianos ^_^ la verdad- y ¡castañas!, que sientan mejor cuanto más frío hace (y además te calientan las manos!)
También la llevamos al teleférico… Os dejo los horarios por si os decidís a surcar los cielos, la vista sin duda es espectacular y diferente.
Saludando a todo lo que veía:
Con paseo final por los bosques de la Casa de Campo al atardecer en que su gran ilusión fue coger un palito y blandirlo como una varita (¡¿dónde ha aprendido a usarla?¡) y correr, correr, correr… libre.
Columpiarse, ver el lago a hombros de papá…
Para acabar caminando 2-3 km y desembocar en MadridRío, el nuevo cauce remodelado que al igual que todo el itinerario es precioso recorrer: por los colores y características propias del otoño…
Fuimos también a un parque temático de la naturaleza, Faunia, donde vio animales que nunca había podido imaginar: insectos palo, caballitos… de mar y pájaros rosas!
Ya otras veces os he enseñado planes tanto a cubierto del frío y creativos como solidarios y un regalo para la vista, siempre acercándote un Madrid divertido, familiar… ¿has estado alguna vez? ¿Te apuntas?
Un abrazo.
Aina
Qué bonitas fotos, y un paseo magnífico, yo también estaba saludando a la gente, subida ahí con vosotros ;)
La verdad es que no sé cómo no subimos más al teleférico, en todo lo que llevo en Madrid sólo he montado dos veces: es precioso, como una feria con vistas increíbles…
Un abrazo guapa!