5 cosas que aprendí de mi madre

Ayer fue mi cumpleaños.

Adoro ese día, siempre me ha pasado. La gente se acuerda de ti, recibes cariño y ;) algún que otro regalo…

De hecho desde el pasado jueves ya empecé a disfrutar la cuenta atrás y por la tarde me ‘autoregalé’ asistir al Tea&Talk que el equipo de Hello!Creatividad organizó junto a Gourmetillo en TheMessyTreeStudio:

Un concepto original de comida, el Teanner o sea ‘té/cena’…

El high tea de estilo anglosajón… o la merienda cena de aquí de toda la vida ^_^ y con el aliciente de la buena compañía y la buena conversación de otras personas con muchas inquietudes comunes: bloggers, artistas handmade, profesionales autónomas… Alfombras, descalzarse, salado, dulce, preparar tu propia taza de té de la variedad que prefieras…

Nuestro plan de final de semana también pasó por Almoneda en su edición Navidad: feria de antigüedades, galerías de arte y coleccionismo… Cayeron dos sombreros vintage, buen precio, buena cálidad, uno de Wichita (Texas) -y el otro no lo sé- además disfrutando de objetos y vistas muy inspiradoras: elegancia, simetrías, todo retro…

Y ya el gran día lo pasé -entre otros- con mi hija y con mi madre.

Me fascinó que tres generaciones de mujeres estuviésemos celebrando… nuestra existencia.

Manos de mi madre y de mi hija… y yo capturando el momento al otro lado

De mi hija aprendo cada día, eso sin duda, pero hoy quiero dedicar el final del post a mi madre, la que hace 37 años me cogió en sus brazos y ya no me ha soltado, abrazándome y guiándome en esta aventura que es la vida.

Aquí, pues… algunas cosas sabias y divertidas que he aprendido de mi madre:

1. Que existe el concepto ‘güisquería’ y si hay música ‘toca un conjunto’…
2. En el armario, poco pero bueno.
3. Los domingos, al museo.
4. En comida nunca vayas a lo barato, si no lo pagarás en medicamentos.
5. Cada uno en su casa sabe lo que pasa.